El 2 de marzo de 2024, el artista colombiano Luis Zuluaga lanzó en Paredes, Portugal, el movimiento artístico llamado Impresionantismo. En tiempos de arte conceptual, la obra de Zuluaga se caracteriza por retratar lo que comúnmente no es retratado, como la marginalidad, lo monstruoso, o lo desagradable, y lo hace poniendo sobre el lienzo la esencia de eso que es rechazado, e incluso considerado indigno.
Fue el maestro Carlos A. Ávila, quien bautizó esta nueva vanguardia como Impresionantismo, en un intercambio epistolar:
“Querido y recordado maestro Luis, desde que compartí tu taller en Bogotá, siempre me pareció impresionante tu obra pictórica, una pincelada que al ser aplicada en capas, interpretaba tonos, semitonos, sombras, luces, transparencias, fondos, textura, y un conocimiento del color impecable, y esa temática tan tuya, tan cruda, tan impresionante, tomada de la vida real, del diario vivir y en la que dabas a entender que el personaje o el elemento llevado a la obra, a la pintura, es hermoso, sin importar su dura crudeza o realidad.
Es así que al ver la exposición de las dos cabezas de pollo, se me vino al cerebro el término 'IMPRESIONANTISMO'. No sé si peco al tomar ese concepto como una definición de tu obra, dime si te gusta, si sientes que es verdad, en fin cuéntame. pero creo que es IMPRESIONANTISMO puro, el puro arte tuo recogiendo el concepto del Impresionismo del Expresionismo para llegar al IMPRESIONANTISMO, un abrazote Luis”.

Además de las cabezas de pollo mencionadas, la obra de Zuluaga está compuesta por personas muertas, carne viva, animales degollados, personas enfermas, cuerpos putrefactos y cuanta criatura o cosa que pueda resultar impresionante.
La obra de Luis es una invitación a no mirar para otro lado, a valorar lo que no es bello, ni deseado, a interpelarse por el horror, a reconocer al otro y, por supuesto, a impresionarse con lo cotidiano.
Este lanzamiento es una buena noticia para el país, y esperamos que siga impresionando al mundo.