La construcción del “reino de Dios en la tierra” entendido como proyecto ético-político de sociedad en equidad social y equilibrio con la naturaleza
A continuación, compartimos un breve fragmento del ensayo “Poder Popular” del teólogo y filósofo argentino Rubén Dri. Se trata de una lectura alternativa de la biblia heredera de la tradición latinoamericana de la teología de la liberación, según la cual, el propósito fundamental de la cristiandad no está en la sumisión, la pasividad de los creyentes y la dominación por parte de los poderosos, sino en sentar las bases de un camino: el de la construcción del “reino de Dios en la tierra” entendidolo como un proyecto ético-político que busca la realización de una sociedad de relaciones sociales más horizontales, en equidad social y equilibrio con la naturaleza.
Poder popular por Rubén Dri
Jesús contrapone al grande, o sea, al que manda con el esclavo y toma partido por el esclavo.
«En la sociedad de Jesús había esclavos y los había en la sociedad de la comunidad de Marcos. Cuando nosotros hablamos de diaconado*, de servir, de servicio, para nada lo asociamos con el hecho de la esclavitud. Pero ése es el contexto en el que se inserta este debate sobre el poder. Jesús contrapone al grande, o sea, al que manda con el esclavo y toma partido por el esclavo.
Pero no se trata de compasión, de conmiseración, de ayuda, de dar la mano al pobre simplemente. No. De lo que se trata es del poder. Ése es el tema que se debate. Jesús y su movimiento, especialmente el grupo más cercano a él, viven momentos de excitación. Están por enfrentar directamente a los poderes dominantes y, en consecuencia, de dar un salto cualitativo en la construcción de la nueva sociedad.
Ahora se dará de comer a todos, se repararán las injusticias, se devolverán las tierras a los campesinos. Pero no se revolucionará radicalmente la sociedad estamental.
Sus discípulos interpretan el poder como dominación. Es la concepción tradicional, compartida por los zelotes**. Naturalmente que piensan que ahora el poder se va a ejercer de una manera distinta, no para oprimir, sino para liberar. Desde arriba se ejercerá hacia abajo una acción bienhechora. Ahora se dará de comer a todos, se repararán las injusticias, se devolverán las tierras a los campesinos. Pero no se revolucionará radicalmente la sociedad estamental.
Jesús da vuelta todo el planteo. El dicho “muchos que eran últimos serán primeros, y los últimos, primeros” (Mc 10, 31) expresa claramente esa revolución. La contraposición es entre los “primeros” –prótoi*- y los “últimos” –ésjatoi*. Los “primeros” son los “grandes”, los árjontes, los que mandan, y los “últimos” son los arjómenoi*, los mandados, los súbditos. En una sociedad bien constituida los “primeros” mandan y los “últimos” obedecen.
Ello implica que los pobres, los campesinos marginados, los siervos no pasan a ejercer el poder como lo ejercían los “grandes”.
Jesús da vuelta la relación y cambia el sentido de la misma. Una doble revolución. Primera revolución: los primeros pasan a ser últimos y éstos, primeros. Segunda revolución: los “últimos” no se transforman en “grandes”, en árjontes, sino en diákonoi, en doúloi. Ello implica que los pobres, los campesinos marginados, los siervos no pasan a ejercer el poder como lo ejercían los “grandes”.
Los que en las naciones mandan, se transforman en dictadores o tiranos, semejantes al Faraón o a Herodes, símbolos del poder de dominación, opresivo, corrupto. En el Reino de Dios se ejercerán funciones, servicios. Ello significa que el poder será horizontal. Ello había sido señalado en diversas parábolas, especialmente en la que se refiere a “la semilla que crece por sí sola” (Mc 4, 26-29) y a la del “grano de mostaza” (Mc 4, 30-32). El poder se construye desde abajo y nunca para dominar».
* Las palabras con asterisco son en griego antiguo. Vale decir que la biblia fue escrita en dicho idioma, de allí que el ejercicio de interpretación por parte de teólogos como Ruben Dri, se base en el significado propio de los términos griegos y no de interpretaciones de versiones traducidas del latín por la iglesia católica.
** Los zelotes eran un grupo judío insurgente que se rebeló contra la dominación el imperio romano. En este caso el autor se refiere a que el grupo de Jesús tenía un objetivo distinto al de los zelotes ya que no pretendía que los de abajo, los dominados, se convirtieran en los dominadores, en los de arriba, sino que el cambio implicara la supresión de la lógica: dominadores-dominados.