Bogotá, 04 de diciembre de 2016. La oficina por la defensa de los derechos humanos de la ONU en Colombia, alerta sobre la persecución sistemática a los líderes y lideresas defensores de DDHH en lo corrido del año 2016, y especialmente, tras la firma del primer acuerdo de paz entre el Gobierno Nacional y las FARC-EP. Señalan que el vacío de poder que ha dejado la anterior presencia de dicha insurgencia en diversas zonas rurales del país en donde estas aseguraban el orden público, está siendo ocupado por distintos actores criminales.
Las cifras que expone la Oficina son las siguientes:
-En el año 2016 hay 52 homicidios a líderes y lideresas sociales. 13 asesinatos se han perpetrado tras la firma.
-35 atentados a defensores de DDHH en lo corrido del año. Indican además que “los métodos de asesinatos y atentados manifiestan mayor grado de sofisticación para encubrir a los autores intelectuales”.
-El 75% de asesinatos y atentados han sido en zonas rurales -marginadas-
La Oficina llama al Estado colombiano a ser un real garante en la protección y seguridad de la ciudadanía, así como a las instituciones que lo componen a desplegar acciones inmediatas que incluyen tanto la protección como medidas que lleven a ocupar los vacíos de poder anteriormente señalados con políticas públicas de derechos sociales, políticos y económicos.